No se si es el olor a los lácteos que provienen de la fábrica anexa al campo u otra circunstancia lo que hace que en el campo de El Centenero el equipo siempre se crezca y saque lo mejor que tiene dentro el coraje para dalro todo sobre el campo.
Si hacemos un análisis objetivo del partido el empate es más que justo, ambos tuvimos ocasiones, y si bien los porteros, las defensas o los delanteros hicieron que el marcador no se moviera.
Entrando en nuestro equipo, en la primera parte, jugamos muy bien, juntitos, defendiendo mucho y con una presión de los medio centros sobre los medios rivales muy buenos. En la parte de delante, Mario en su isla y Lolo en la suya, hacían lo que podían para no caer en fuera de juego y coger algún balón.
Ya en la segunda parte, pese al viento en contra, la defensa y el portero continuaron en la tónica de seriedad que venían mostrando en la primera mitad. En el medio se noto el bajó físico de Pedro que de nuevo con los gemelos cargados, acuso el desgaste físico realizado. Tuvimos el partido en una ocasión de Mario a falta de 30 segundos que nos hubiera dado los 3 puntos.
Lo más importante, se luchó.
Saludos y arriba el Viña Nava.
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